jueves, 2 de septiembre de 2010

"El ser contextual"




Para definir como juega o como va a jugar un equipo de fútbol, siempre bajo la premisa de que la aspiración de todo equipo es jugar bien para ganar, tenemos como imperativo definir antes lo que es jugar bien, tanto a nivel colectivo como individual, y siempre teniendo en cuenta la incientifidad del fútbol como deporte en el que priman factores diversos y muchos de ellos intangibles.

Empezaremos por decir que, por mucho que nos guste un estilo determinado, no debe haber prejuicios a la hora de valorar, de manera objetiva, si un equipo desarrolla un buen juego o no. Jugar bien se podría definir como aplicar correctamente un modelo que te permita imponer tus virtudes sobre tus defectos, y las virtudes del rival, en pro de una victoria. No hay un factor determinante que nos diga cuando un equipo juega bien (Puedes tener 30% de posesión que puedes estar jugando un partido excelente), y cada partido es un contexto diferente. Las mismas señales que hubo en uno no se aplican 100% en otro, por más que sean los mismos equipos. El Chelsea jugó muchísimo mejor que el Barcelona en las semifinales.

Bajo ese concepto hay también que decir que el fútbol es de los futbolistas. Estos son materia prima que te ayuda a desarrollar un modelo en que optimices su rendimiento para disminuir el del rival. El fútbol debe entenderse a través de contextos, favorables y desfavorables, y la creación de los mismos. La coherencia entre jugadores ayuda a optimizar y potenciar sus virtudes individuales y del colectivo, así, un equipo de fútbol debe estar conformado por jugadores, no complementarios entre sí, sino que jueguen a lo mismo, y con eso no me refiero a la teoría "cromos repetidos", sino a que cada jugador dé las soluciones que los otros necesitan para crear ese contexto favorable del que hablamos. Si la apuesta para optimizar el juego colectivo, jugar bien, es la del fútbol interior, es consecuente tener jugadores coherentes con ese planteamiento y, por ende, es mejor tener a Marcelo o Alves de laterales que a Maicon y Abidal, pues son jugadores que responden al contexto de "juego interior y en corto" que se plantea. Si a los jugadores se les da un contexto favorable, lo normal es que se juegue bien, y se jugará mejor en relación a la calidad individual que atesore cada jugador. "El equipo es un ser contextual", Lillo dixit.

Teniendo claro el concepto de jugar bien como colectividad, pasamos a dibujar el mismo concepto a nivel individual. ¿Cuando juega bien un futbolista? Es una respuesta que puede tener varias interpretaciones. La que aparece en la prensa es la superficial, la de los goles, las asistencias de gol, las paradas y los robos de balón. Hay que decir que el futbolista es un todo que se divide en muchas cosas. Uno puede analizar a un futbolista desde el apartado técnico, el apartado físico, el apartado táctico, el apartado mental y el apartado intangible de la sensibilidad, que lo reúne todo y es además un parte de ese todo mayor que es un jugador de fútbol.

Técnicamente un futbolista puede reunir condiciones extraordinarias. Calidad en el pase, visión de juego, calidad en la definición, calidad en la anticipación, calidad en el quite. A nivel táctico hay jugadores con gran lectura del partido (Analizar el desarrollo del mismo y, a partir de la interpretación de cada situación, tomar la decisión correcta sobre que le conviene más al colectivo para generar y tener el contexto favorable anteriormente explicado), polivalentes, con gran lectura de los movimientos del rival y los compañeros. En apartado mental físico hay jugadores con gran velocidad, gran fuerza, altura, potencia, agilidad; y en lo mental hay jugadores con capacidad de liderazgo, de sobreponerse a la presión, de influir en los rivales y compañeros, etc. Al referirme a la sensibilidad me refiero a la capacidad natural y nata (Se tiene o no se tiene), que puede ser mejorada, de un jugador para decidir correctamente sus movimientos, con y/o sin balón, dentro de un terreno de juego, a pesar de, muchas veces, no tener el conocimiento de porqué hacer X movimiento.

Entonces, siguiendo el silogismo, un jugador de fútbol juega bien cuando logra que sus cualidades potencien el colectivo a partir decisiones correctas que permitan a sus compañeros gozar del contexto ideal para que ellos también desarrollen sus condiciones.

4 comentarios:

  1. Contextos y sinergias, lo que precisamente no valoran los simuladores y, como consecuencia, la gente en general. Es muy difícil comprender que "juntar nombres" o "tener el balón" no significa "jugar en equipo" ni "jugar bien".

    De todos modos, discrepo parcialmente en un punto; desde mi punto de vista, el fútbol sí que tiene una parte científica, y desde las estadísticas se puede analizar si éstas son lo suficientemente completas. "Tiros a puerta" de por sí puede no significar nada, pero un mapa de calor con las zonas de disparo ya empieza a tener su significado; y, como se decía en Ecos el otro día, el número de balones recuperados no tiene por qué ser algo representativo, pero si sabes dónde y en qué circunstancias se han recuperado... ya es otro rollo.

    PD: Gracias por la referencia en el post de Ibrahimovic. Creo que es la primera referencia que hayan hecho a mi blog en la vida... ^^

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  2. Cuando Lillo dijo eso de que el equipo es un ser contextual... Las burlas fueron varias. Eso que es lo que más trabaja un entrenador, los creadores de opinión lo ridiculizan. Y así está el conocimiento sobre el deporte que se ama.

    Sobre ese punto... Obviamente se pueden realizar reflexiones desde el método científico, pero a lo que me refería con incientifidad del fútbol, era a la no posibilidad de encontrar una ecuación que encierre todo lo que influye en el fútbol, así como la no posibilidad de predecir un resultado desde unas premisas.

    PD: Tu blog es una joya. Enserio. Lo visito siempre.

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  3. "Bajo ese concepto hay también que decir que el fútbol es de los futbolistas. Estos son materia prima que te ayuda a desarrollar un modelo en que optimices su rendimiento para disminuir el del rival. El fútbol debe entenderse a través de contextos, favorables y desfavorables, y la creación de los mismos. La coherencia entre jugadores ayuda a optimizar y potenciar sus virtudes individuales y del colectivo, así, un equipo de fútbol debe estar conformado por jugadores, no complementarios entre sí, sino que jueguen a lo mismo"

    Este párrafo es una joya, de verdad. No podría estar más de acuerdo. Me ha recordado una frase muy ilustrativa de Óscar Cano que dice algo así como que un equipo de fútbol es "un sistema formado por 11 jugadores, en el que todos condicionan y en el que,en consecuencia, cada uno de ellos estará condicionado a su vez por los demás".

    Sobre la cuestión de cuando juega bien un futbolista yo lo tengo clarísimo: cuando toma las desiciones adecuadas en cada momento del juego y las ejecuta correctamente, para de esa manera facilitar el entorno a sus compañeros y fortalecer así al colectivo.

    Bonito post Kundera, para leerlo y parase a reflexionar.

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  4. @ Javiculé

    Hay un sociológo ruso, Sorokin, que dice que las sociedades son eso. Todos somos actores y todos influimos al todo, jugamos un rol.

    El fútbol es eso. Cada decisión tomada afecta al resto. Por eso hay que tratar de que nuestras decisiones creen contextos favorables para nuestros compañeros, y desfavorables para el rival. A eso, supongo, se refería Cruyff cuando dijo que el fútbol no se juega con los pies, sino con el cerebro.

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