lunes, 26 de julio de 2010

Homenaje al flaco

Homenaje a Juan Carlos Valerón, genio infravalorado y opacado por las nuevas generaciones. Jugador grande, no tan bueno como Riquelme, años luz mejor que Guti y, mínimo, al mismo nivel que Xavi. Quizá mejor. Hoy recordamos su última gran exhibición en Champions League, ante el Milan de los Inmotarles.

El fútbol, que es dominado por los grandes futbolistas, y estos normalmente están donde está el dinero, a veces regala equipos pequeños que compiten en el máximo nivel jugando al fútbol. En los últimos 10 a 12 años, el fútbol español ha regalado varias de esas joyas de coleccionista, muchas de ellas con el Bonus Track de tener a un jugador grande entre sus filas. Uno de ellos fue el EuroDepor de Juan Carlos Valerón.

Este escrito no tiene como intención un análisis detallado ni de aquel gran conjunto ni de la eliminatoria que tomaré como referencia para homenajear al flaco, sino que será simplemente eso, un homenaje a un futbolista grande que tuvo la mala (O buena, quien sabe) fortuna de recalar en un equipo pequeño cuando su talento obedecía a las más grandes camisetas.

Milan 4 – 1 Deportivo

Se jugaban los cuartos de final de la Champions League 2003/2004 y el EuroDepor visitaba a un viejo conocido de la pasada Champions: El campeón defensor, los inmortales de Carlo Ancelotti en todo su esplendor.

Ancelotti hizo uso de su equipo habitual, salvando el cambio Nesta por Costacourta, mientras el equipo de Javier Iruteta salió al escenario sin Diego Tristán, titular teórico, y sin Victor, esto último provocó un cambio en el dibujo, pasando a un rombo en la mitad de la cancha y sin nadie ocupando la zona derecha del ataque. El Depor presentaba un equipo, por lejos, más modesto que el rival, que, comandados por Maldini, Cafú, Pirlo, Seedorf, Kaká y Shevchenko, gozaba de una de las plantillas más talentosas de los últimos 20 años. Y, a pesar de todo, Valerón logró que el Deportivo fuera superior durante casi todo el primer tiempo.

Sin un extremo derecho en el campo, la zona derecha del ataque gallego tenía que ser ocupada por un sacrificado Sergio quién cumplió una labor doble, de interior conceptual y de extremo posicional, durante todo el partido, pero la exigencia, tanto física como futbolística de dicha labor sobrepasó al deportivista y Pancaro, lateral izquierdo rival, tuvo una autopista hasta la zona de Lionel Scaloni desde la que el Milan produjo su fútbol más peligroso en los primeros 45 minutos. Salvo lo que viniera de la banda izquierda, la de Pancaro y Maldini, que jugó un partidazo desde el central zurdo, el Milan carecía de peligro. Las líneas de pase a Kaká fueron hábilmente tapadas, y el Brasileño casi nunca recibió en un contexto favorable, y la primera línea de medios italianos tuvo que precipitarse y tirar balonazos a tierra de nadie como único recurso.

Y apareció Valerón. El Deportivo se puso en ventaja rápidamente y el recurso Valerón apareció. Mientras Kaká no encontraba lugar para recepcionar, Valerón flotaba en alrededor de 30 metros a lo largo y ancho del terreno, creando líneas de pase hacia él, recibiendo de espaldas, agregando pausa y ritmo, dándole oxígeno y superioridad al mediocampo deportivista frente a ese rombo majestuoso de Pirlo-Gattuso-Seedorf-Kaká. El ‘Flaco’ hacía siempre lo correcto cada vez que entraba en juego, pausando el ataque para que Sergio llegara a posición de extremo, o acelerando el ritmo para romper con sorpresa. Valerón logró que el Milan corriera y se desordenara. Primer Slalom en el círculo central y elimina una línea de presión, segundo slalom y pone a Pirlo, Seedorf y Gattuso a correr atrás de él. Y además daba ese último pase mágico que poseía. Crack.

Sin embargo el embrujo duró poco. Sobre la hora el Milan ganó el único centro lateral en toda la eliminatoria y Kaká empató el partido. Como el fútbol, algo que repetiré muchas veces en este Blog, es un estado de ánimo, el Deportivo se vino abajo. Entraron a la segunda mitad desconcentrados y en un soplido el Milán sacó de la chistera tres goles, acabando así el partido con un poco esperanzador 4-1 en la ida.

Deportivo 4-0 Milan

Para la vuelta, Riazor recibía, esta vez sí, los dos onces de gala de ambos equipos, salvo Tristán. La vuelta de Víctor permitió a los de Iruteta volver a su 4-2-3-1 con único pivote y dos extremos. Como consecuencia el Milan no encontró las facilidades para pasar el mediocampo desde su lateral débil, además de que le dio a Sergio un rol acorde a sus muy buenas cualidades, y que le dio muy buenos réditos al Deportivo a lo largo del partido.

Tal como pasó en San Siro, el Depor se encontró con el marcador arriba desde muy temprano, una inyección anímica importantísima para los de ‘Flaco’. Valerón realiza un juego muy parecido a lo de San Siro, aunque menos protagónico debido a la gran actuación de actores de reparto como Sergio, Andrade, Molina o Luque, y de todo el equipo en general. El partido es parejo durante gran parte de la primera mitad, con ambos equipos plantándose en ¾ con asiduidad, aunque el Milan se encontró con una barrera albiazul que no perdió ningún centro lateral en todo el partido y que no permitió que los delanteros rossoneros recibieran habilitados en el área.

A partir del minuto 25, más o menos, Valerón entro más en juego y su virtud de convertir una jugada común en ventaja para su equipo, salió a flote. Valerón clarificaba, oxigenaba, aguantaba y verticalizaba. Flotando entre líneas Valerón cambió la dinámica del partido, inclinándola hacia su equipo. Luego llegaría su merecidísimo gol que empujó aún más al Deportivo a por la hazaña. Esta se consumaría con un gol de Luque, de gran partido, sobre el final de la primera parte. Remontar el 4-1 de la ida no sólo era posible, se había logrado.

La segunda parte siguió el mismo curso. El Milan superado, y el Deportivo respondiendo al máximo nivel de exigencia tanto desde lo individual como desde lo colectivo, y jugadores medianísimos como Naybet ganaban lances contra delanteros como Shevchenko, mientras Kaká no encontraba en sus delanteros un socio para atravesar el muro deportivista. Ancelotti tiró del recurso Serginho, sacando a un desdibujadísimo Pirlo, pero no hubo éxito. El Milan sin mediocentro perdió más de lo que ganó y el caramelo que representó eso para Valerón fue enorme. ´El Flaco’ revoloteó a sus anchas en el terreno de juego, y el Deportivo siempre lo encontró con espacio para jugar. La frutilla del poste la puso Fran con un zurdazo a falta de 15 minutos para el final. Proeza y humillación al campeón reinante en el último partido de élite del EuroDepor.

2 comentarios:

  1. Un grande Valerón, sin duda, así como el Súper Dépor. Grandes partidos contra el Milan y el Bayern.

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  2. @Yexx

    Sin duda. Valerón llegó a condicionar eliminatorias de Champions ante equipos de ese nivel. Un grande,

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